El soldadito roto.

Guardo entre mis tesoros,que son cosas que me traen recuerdos, un soldadito ,esta hecho de un plástico duro y quebradizo, es natural que sea así ,porque me fue regalado aproximadamente cuando yo tenia ocho años, es el ultimo de compañía de ciento cincuenta soldaditos,que contaba con banda marcial , y fusileros,todos eran hechos a semejanza de la guardia real de Inglaterra, con su casaca roja de botones dorados, pantalones azules y el famoso gorro de pelo de oso que se llama bearskin ,la banda andaba adelante y los fusileros que eran cien la seguían .El soldadito que guardo es el primero de la banda ,el bastón mayor, le falta una pierna un brazo y su uniforme a perdido el color,este soldadito representa para mi una época de recuerdos imborrables y hermosos.

En ese tiempo mis padres mis hermanitos y yo vivíamos en una casa rodeada de mucho terreno,en un solar aledaño viva un hombre con su mujer el hombre se llamaba Nelson y la mujer Hilda una mujer muy bella, eran una pareja joven y hermosa los recuerdo alegres cuando bromeaban con mi padre y mi madre,sus vecinos mas cercanos, en unas navidades creo que del año 1968 el señor Nelson me regalo una caja que contenía los soldaditos,fueron el mejor regalo que recibí cuando niño,los colocaba en formacion teniendo como referencia una fotografía en la tapa de la caja.

Pasaba horas jugando con mis soldaditos, tantas horas, que se fueron partiendo uno a uno,cada vez que jugaba quedaban menos,pasaron unos meses y recuerdo que un día, Hilda la mujer del señor Nelson toco la puerta de la humilde casa de madera donde vivíamos ,gritaba con desesperación, recuerdo que gritaba a mis padres que la ayudaran que Nelson se estaba ahorcando,salieron mis padres corriendo hacia la casita donde ellos vivían, esta quedaba por la parte baja de nuestra casa
decidí correr tras mis padres sabiendo que me castigarían en esos tiempos los niños no hacían lo que les daba la gana como ahora.

 Recuerdo con claridad al hombre colgado de una soga, y a mi mama subiéndolo por las piernas mientras mi papa le quitaba la soga del cuello,por unos instantes parecía que estaba muerto pero al rato se recupero respiraba con dificultad y lloraba como un niño mientras gritaba.La imagen horrorosa de ver a aquel hombre tan bueno que me habia regalado los soldaditos, colgando de una soga fue impactante para mi ,un niño inocente de solo ocho años, después de que paso esto no vimos mas al señor Nelson ,Hilda se mudo al poco tiempo y se desvanecieron de nuestras vidas, ya mas grande me entere por otros vecinos que Nelson habia intentado suicidarse porque Hilda lo traicionaba con un hombre que vivia cerca aun así no entendía como a las personas buenas les pasaban cosas malas.

De esto han pasado 45 años ,mi papa murió hace seis años, hace unos treinta y cuatro que nos mudamos de aquella casa donde nos criamos mis hermanitos y yo.Aquel niñito que jugaba con sus soldados solo existe en el recuerdo,ya soy un abuelo,pero aun así recuerdo como si fuera hoy al hombre colgando de la soga,de como mis padres le salvaron la vida y a mis ciento cincuenta soldaditos de impecables uniformes y altos gorros.Me pregunto todavía, que seria del señor Nelson
que seria de hilda su bella mujer, hoy debe ser una ancianita, que seria de los soldaditos de color rojo y azul.Todo esta en el ayer, y pensar que todo esto a vuelto a mi memoria cuando buscando un lapicero,esta madrugada tropecé con el único objeto sobreviviente de aquella linda época de la infancia perdida.Un soldadito roto y viejo ya descolorido que guardo entre las cosas que mas quiero.
  
De Juan francisco Lara Fernandez


Julio 2012