El duende de las tortas.

Debajo de mi cama vivió hasta hace poco un duende ,era mas viejo que yo y desde hace mucho tiempo no lo veía,pero sabia que estaba vivo  porque de vez en cuando me hablaba,cuando era un niño jugaba conmigo y me hacia reír,usaba  un gorro largo de color rojo y zapatos de duende, también tenia dientes de plata ,de estatura  tendría unos cuarenta centímetros y de sus orejas salían unos largos pelos rojos,en el cuello llevaba colgada una cuchara también de plata, una vez le pregunte que le gustaba comer y me dijo que solo comía tortas y dulces de cumpleaños es lo único que puede comer,el es un duende de las tortas,


Los duendes de las tortas son pacíficos y les gusta jugar con los niños,ellos los pueden ver porque tienen inocencia, cuando dejas de ser inocente ya no los puedes ver,el duende que vivía debajo de mi cama se llamaba Señor Bitter.como dije antes solo se alimentaba de dulces de cumpleaños, cuando en una casa alguien cumple años los duendes de las tortas se esconden en los rincones oscuros y cuando alguien se descuida salen de su escondite y se comen la torta o el quesillo sin que el afectado se de cuenta, también de noche cuando todos duermen se meten en la nevera y se comen los restos de tortas y pasteles,tal vez es por eso que nunca duran las tortas de cumpleaños , los duendes de las tortas se las comen.


Hace poco me di cuenta que el duende estaba enfermo ya casi no me hablaba y cuando lo hacia era para pedirme hojas de trébol ,con eso se curan los duendes sus enfermedades, Ayer en la mañana se despidió de mi ,me dijo que se sentía muy mal ,tenia trescientos cincuenta años y que iba a morir, al sonar un trueno me dijo adiós mi amigo el Señor Bitter .


Pero de ayer  he sentido algo muy extraño, siento que me voy empequeñeciendo y la ropa me queda grande, no se como pero llevo colgada en el cuello la cuchara de plata que usaba el Señor Bitter para comer y de mis orejas comienza a salir un pelo rojisimo e hirsuto, lo peor es que siento grandes deseos de comer torta de cumpleaños  ahora me toca a mi ser un duende de las tortas.

De Juan Francisco Lara Fernandez. San Mateo Diciembre 2000

Este cuento lo escribí en San Mateo hace unos doce años estaba en unos papeles escrito a mano, solo corregí un poco el estilo y la ortografía es mi primer cuento.


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